Naciones Unidas, 20 sep (Prensa Latina) La urgencia de los desafíos climáticos nos obliga a hacer algo más que deleitarnos en la retórica, expresó hoy en la ONU el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, en referencia al cambio climático.
En su discurso durante el 78 período de sesiones de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en el segundo día de sesiones, Sánchez también defendió el multilateralismo y un mundo «basado en reglas».
El líder español manifestó su solidaridad con las víctimas de los terremotos en Marruecos y Libia, habló de las consecuencias del cambio climático y de la necesidad de adaptarnos a «algo que ya está aquí».
No hay más alternativa que acelerar el despliegue de las energías renovables (…) con solidaridad hacia los países más vulnerables, afirmó, al tiempo que exhortó a implementar una «revolución tecnológica».
Es momento de pasar a la acción porque el tiempo se agota, dijo Sánchez antes de referirse a la urgencia de implementar políticas para mitigar el cambio climático, hecho que, dijo, requiere valentía y determinación.
Asistimos a una ola de desconfianza en las instituciones, añadió el líder del gobierno español, quien también se refirió a la desigual distribución de las riquezas que impera hoy en el mundo.
Al defender el multilateralismo y un mundo «basado en reglas», Sánchez afirmó que de continuar por esta senda más de 500 millones de personas seguirán en la pobreza y no se alcanzarán los objetivos desarrollo sostenible.
Debemos dotarnos de los recursos necesarios para lograr esas metas, con valentía y para eso el marco de Naciones Unidas deber ser el mayor foro de discusión, agregó.
También manifestó de voluntad de su país de acoger la cuarta conferencia sobre financiación al desarrollo en 2025.
La paz es la base para el desarrollo económico, dijo más adelante antes de referirse a los diferentes conflictos que hoy tienen lugar en varias regiones del orbe.
El líder español criticó el conflicto bélico en Ucrania y manifestó su voluntad para trabajar en aras de una «paz justa y duradera».
Desde su posición al frente del Consejo de la Unión Europea Sánchez mostró su respaldo al régimen de Zelenski, en consonancia con la política de Occidente.
Por último se refirió a las relaciones de la UE con los países de Latinoamérica y en ese sentido habló de la cumbre UE-CELAC como un «autentico punto de inflexión» hacia ese objetivo.